Volkswagen no tendrá que cerrar sus fábricas en Alemania después de todo, aunque eso podría afectar al Golf


Volkswagen no tendrá que cerrar sus fábricas en Alemania después de todo, aunque eso podría afectar al Golf
Volkswagen se enfrenta a una de las crisis más profundas vividas en las últimas décadas.

La situación que atraviesa Volkswagen es cuanto menos comprometida. Los alemanes negocian con los sindicatos para evitar el cierre de fábricas, aunque habrá consecuencias. El Golf podría irse fuera de la Unión Europea en un cambio histórico.

El coche eléctrico y las diferentes crisis que ha vivido la industria del automóvil en Europa han hecho mella entre los fabricantes. Quien más, quien menos, está atravesando su particular odisea por el desierto. Volkswagen es el mayor fabricante a escala europea y, por lo tanto, es el que más está sufriendo el impacto de la delicada situación comercial que atraviesa el Viejo Continente. Las ventas han caído al punto de que los alemanes se han planteado cruzar líneas rojas que nunca antes habían considerado. Por suerte, parece que no será necesario tomar tales decisiones, aunque sí podría sucederse un cambio histórico.

Volkswagen necesita recortar gastos. Wolfsburgo está tratando de ejecutar el plan de ahorro más serio de su historia. Casi 15.000 despidos a escala internacional y el cierre de algunas de sus fábricas. Si bien no sería la primera vez que Volkswagen cierra una planta, esta ha sido la primera crisis en la que se ha planteado la posibilidad de clausurar hasta tres fábricas en suelo alemán. Ni que decir tiene que tal anuncio ha encendido todas las alarmas rojas de Alemania. El Gobierno de la nación hará todo lo posible para evitar semejante paso, pero son varios los protagonistas que entran en esta escena tan dantesca. Los principales son Volkswagen y el principal sindicato que impera en las fábricas de la marca: IG Metall.

volkswagen-no-cerrara-fabricas-alemania-Por primera vez en la historia el Golf europeo podría fabricarse fuera de la Unión Europea.

Un acuerdo a tres partes que podría suponer grandes cambios en la marca

Todas las partes están condenadas a entenderse y eso significa hacer sacrificios. IG Metall no quiere, bajo ningún concepto, que se cierren fábricas en Alemania. La cancillería germana se suma a esa postura. Sin embargo, Volkswagen tiene que reducir cómo sea los gastos. Esta misma semana ejecutivos de la empresa y representantes sindicales se han reunido por quinta vez para tratar de ejecutar un plan de rescate y empiezan a dejarse ver los primeros brotes verdes, aunque las posturas siguen lejanas. Uno de los puntos que hay sobre la mesa es derivar la producción del Volkswagen Golf a México.

El Golf es la joya de la corona de la marca germana. Su coche más popular y vendido en todo el mundo. Es esencial, crítico, mantenerlo con vida y atractivo a los clientes y eso pasa por ofrecerlo a un precio competitivo que ahora mismo ha perdido. La compañía estaría pensando en derivar su producción a México con la intención de ahorrar significativos costes. Es más barato ensamblarlo en el extranjero y trasladarlo a Europa que fabricarlo en Alemania. De esta forma los alemanes podrían bajarle el precio y así poder mantenerlo en un rango atractivo para los clientes. Por el momento no hay más información al respecto.

volkswagen-no-cerrara-fabricas-alemania-Las fábricas de coches eléctricos apenas tienen trabajo ante la baja demanda.

Perder la producción del Golf en Alemania sería una gran concesión por parte del comité de empresa y de los sindicatos. Se considera que la factoría de Puebla está infrautilizada. Apenas fabrica algunos modelos que Volkswagen vende en Estados Unidos. Tras haber resuelto, o al menos eso parece, la incógnita del Golf, se plantean otras dudas importantes, como la producción de los eléctricos. Volkswagen no ha acertado, ya sea con los tiempos, las presentaciones o las estrategias. La familia ID apenas tiene repercusión en las ventas continentales y es necesario cambiar el planteamiento, lo que también incluye la producción.

En este caso, la planta de Zwickau ensambla gran parte de los ID.3, ID.4 e ID.5 que llegan a las calles, aunque el ID.4 también se ensambla parcialmente en Emden. Un posible acuerdo podría suponer la interrupción de las operaciones eléctricas de Zwickau dado que la demanda es tan baja que la planta apenas tiene trabajo. Todos los modelos podrían derivarse a Emden, capaz de cubrir la demanda actual sin problemas. Si en el futuro las peticiones aumentan, Volkswagen podría reactivar Zwickau sin problemas. Esto no supone el cierre de una de las factorías más modernas de la empresa. Seguiría encargándose de la producción del Audi Q4 e-tron y del CUPRA Born.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *